21/10/2023 - La Nación

El “Cariló del oeste”. Cómo es el polo gastronómico que crece en un bosque a media hora de la ciudad

La mayoría de los locales se concentran en centros comerciales, integrados al paisaje.

En tan solo 4 cuadras concentra más de 30 restaurantes, bares y cafeterías, dentro de un entorno que respeta la naturaleza.

Durante la semana, Sebastián García hace su magia detrás de la barra de Presidente, bar ubicado en el corazón de Recoleta y que llegó a ocupar el puesto N°61 del ranking World’s Best Bars. Pero los fines de semana, este reconocido bartender despacha cocktails clásicos junto con creaciones que llevan su firma en Nob3l. Este flamante rooftop bar ubicado en la terraza del complejo Leloir Plaza ofrece una vista inmejorable de Parque Leloir; de su bosque pero también del polo gastronómico que se desarrolla sobre la avenida Martín Fierro, a solo 27 kilómetros de la ciudad de Buenos Aires.

“Parque Leloir es de por sí un barrio muy particular, que tiene un microclima propio y muchos árboles. Todo eso se vive desde Nob3l, que está en un tercer piso, y que es la altura máxima de construcción permitida, para cuidar este ecosistema tan especial”, dice Seba García, que creó junto a dos socios –todos de zona oeste– este proyecto “del oeste al mundo”. El cuidado por los detalles de Nob3l –tanto en la gastronomía y coctelería como en el servicio y en la estética del bar– está a tono con el estilo refinado pero a la vez eco-friendly que atraviesa al polo foodie de Parque Leloir.

Son los arboles añosos, altos y de diversas especies, los que dan identidad al paisaje que en los últimos años le ha valido a este barrio bonaerense el apodo de “Cariló de zona oeste”. De hecho, algunos de sus centros comerciales y de oficinas asumen la fisonomía de los paseos de esa ciudad balnearia, en donde vegetación y construcción conviven en armonía. Este polo gastronómico que concentra en 4 cuadras más de 30 locales de muy diversas propuestas se encuentra dentro del segundo pulmón verde del conurbano (junto con el parque Pereyra Iraola), y eso se respira al caminar la avenida Martín Fierro bajo los eucaliptos o los pinos.

Sus 600 hectáreas han sido declaradas Área Ecológicamente Protegida por el municipio de Ituzaingó, por lo que cuenta con guardaparques que cuidan la flora y la fauna, e incluso con una entidad integrada por vecinos (Parque Leloir Asociación Civil), que busca preservar el entorno natural. Parque Leloir, su bosque y sus calles con numerosas curvas y rotondas, son obra del arquitecto, urbanista y paisajista francés Carlos Thays (que como Director de Paseos de la ciudad de Buenos Aires estuvo detrás del diseño del Jardín Botánico o el Parque Centenario, entre otros 67 paseos y plazas). Fue la familia Leloir, propietaria de la estancia que ocupaba lo que es hoy Parque Leloir, la que encargó el diseño de su parque y bosque a Thays.

Al pie de la autopista
Parque Leloir comenzó a proponerse como polo gastronómico a mediados de la década pasada. Uno de los primeros restaurante en establecerse fue Bruce Grill Station, dentro del complejo comercial y de oficinas Leloir Plaza, uno de los que actualmente concentra mayor número de establecimientos gastronómicos.

“Cuando inauguramos, en 2015, el polo gastronómico como se conoce ahora todavía no existía. Realmente fue una apuesta siguiendo una corazonada de que iba a funcionar. Nunca nos imaginamos que el éxito iba a ser tal y que el crecimiento sería tan exponencial”, cuenta Marcelo Gil, al frente de este restaurante de gastronomía de estilo americano cuyos platos –como sus clásicas Ribs El Jefe, con barbacoa casera– llevan el aroma de los fuegos con leña de quebracho colorado.

Para Marcelo el diferencial de Parque Leloir es “que se ubica en una reserva natural, rodeado de vegetación, y un ambiente cálido y tranquilo”. Eso mismo destaca Agustín Demirdjian, director de Desarrollo de Kansas, cadena que abrió un local dentro el complejo Thays, también sobre la Martín Fierro: “Un elemento particularmente atractivo es su entorno arbolado que crea un ambiente agradable y relajado. Leloir es un lugar tranquilo y apacible donde escapar del ruido de la ciudad”.

Este último argumento no es menor. No solo se encuentra a solo 27 kilómetros por autopista desde la ciudad de Buenos Aires, sino que además también se llega rápido desde Zona Norte por el Camino del Buen Ayre. “Otra de las razones por las que elegimos Parque Leloir es por la estratégica ubicación de la calle Martín Fierro, que forma un corredor excepcionalmente bien conectado, ya que se encuentra cerca del Acceso Oeste y del Camino del Buen Ayre –agregan desde Kansas–. Esta accesibilidad facilita la llegada de nuestros clientes, provenientes tanto de la zona oeste como de otras áreas cercanas”.

Esa accesibilidad es quizás el principal motor del actual desarrollo comercial (e inmobiliario). “Parque Leloir siempre fue un lugar especial dentro de Buenos Aires, no muy conocido. Residía gente de la cultura y la industria en grandes quintas. Pero a partir de la llegada de la autopista mucha más gente empezó a buscar un mejor lugar donde vivir, no tan alejado del centro” , cuentan Alberto y Lulú Jankilevich, propietarios de Sui Gele, heladería con juegos para chicos montados sobre el césped de la vereda, dando forma a un espacio que funciona como plaza.

“Nosotros somos del oeste, pero de Haedo. Cuando nos mudamos a Leloir vimos que la zona tendía al crecimiento y decidimos poner nuestra heladería ahí. Lo elegimos porque nos enamoramos de su atmósfera y su ambiente relajado”, agregan.

Y aunque el crecimiento de Leloir se visibiliza a través de sus restaurantes, la expansión abarca otros rubros. “No solo es el polo gastronómico, que es la joyita, sino que también hay construcción de nuevas viviendas, ya que mucha gente después de la pandemia vino a vivir a Parque Leloir para estar más en contacto con la naturaleza”, dice Seba García

Incluso la avenida Martín Fierro ha incorporado hotelería de alta gama, con el Mérit Parque Leloir Apart Hotel y el Hilton Garden Inn Convention Center & Spa Parque Leloir, que abrirá en 2025. “El público al que apuntará está focalizado en el corporativo en días de semana y el turístico de fin de semana, con el mix que ofrecerá para eventos sociales, y la sinergia con las noches de hotel que generará para familiares y amigos por la política de alcohol cero al volante”, cuenta Marcelo Vernino, director comercial de Romay Desarrollos Inmobiliarios.

En su fisonomía actual, la mayoría de los locales gastronómicos se encuentran nucleados en complejos, que incluyen también oficinas y otros servicios. En Leloir Plaza, por ejemplo, hay desde locales de cadena como Taco Box, Sushi Club o Almacén de Pizzas hasta el destacado rooftop bar Nob3l o los restaurantes Malcriado o Rocky, entre otros.

Enfrente, en el complejo Thays, cadenas como Le Pain Quotidien, Kansas, Lucciano’s o Temple comparten el arbolado terreno con la parrilla Cuenta Ganado o el Hilton. Apenas en la bajada del Acceso Oeste, comparten espacio Burger King, Café Martínez, Freddo y Juanito Tex Mex. A eso se suman muchos más locales distribuidos en las arboladas cuadras de la Martín Fierro.

“El potencial de este barrio es infinito –asegura Marcelo Gil, propietario de Bruce, pero también de Malcriado–. Este polo nació en el 2015 y desde esa fecha no paró de crecer. Todo el tiempo inauguran nuevas marcas de renombre internacional, y se vienen muchas más”.


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